La reacción del marido
Según él, mi marido se había puesto en contacto con él, confuso y agitado por los cambios repentinos en nuestras cuentas financieras. El correo electrónico expresaba el enfado de mi marido, molesto por unos cambios sobre los que no tenía ningún control. Casi podía verlo, caminando de un lado a otro, con el teléfono en la mano, enfrentado a la realidad de la situación. Este cambio confirmó que mis acciones habían generado sentimientos, confirmando la importancia de mi plan.

La reacción del marido
Garantía de legalidad
El abogado le hizo saber que todo iba de acuerdo con la ley, lo que probablemente no bastó para calmarle. Sabía que mi marido tenía preferencia por el control, y que sería crucial perturbar su mundo de una forma cuidadosamente gestionada. La información del correo electrónico indicaba que todas las medidas adoptadas se ajustaban a la ley, precaución que deseaba cumplir estrictamente. Esta noticia me tranquilizó. Anticipándome a sus frustraciones, sentí cierta confianza al saber que tenía una base sólida, tanto legal como moralmente.

Garantía de legalidad