Apertura del último sobre
Todos se inclinaron hacia delante, curiosos y ansiosos, mientras él abría el último sobre. Todo estaba en silencio en la habitación, excepto el débil sonido del papel. El contenido temblaba ligeramente entre sus dedos, mientras sus ojos pasaban de una página a otra. Nuestros hijos, antes ansiosos, miraban ahora con la respiración contenida. De la confusión a la comprensión, su rostro cambió. Éste era el momento que lo definiría todo, que establecería el destino de nuestra historia común.

Abrir el último sobre
Desvelando los documentos
Había una copia firmada de los papeles del divorcio, así como una escritura de traspaso de nuestra casa, para que pudiera recibirla legalmente. El asombro se reflejó claramente en su rostro al darse cuenta de las consecuencias. “Ni hablar”, murmuró mientras hojeaba los documentos. Le golpeó la realidad de nuestra situación como una ola lenta y ondulante. Los niños se miraron ansiosos, percibiendo la gravedad del momento. Bajo el peso de las palabras no dichas, el aire se espesa.

Desvelar los documentos

