Agente detenido e interrogado
Mientras seguían observando, empezaron a aparecer más pruebas de la mala conducta del agente. “Mira esto”, Cuando el agente regresó a la comisaría, fue rápidamente detenido e interrogado. “No irás a ninguna parte”, le dijo un investigador al policía mientras lo escoltaban a una sala de interrogatorios. El rostro del agente palideció cuando la puerta se cerró tras él. Las preguntas volaban a su alrededor, y el ambiente estaba cargado de ansiedad. Su conducta normalmente plácida se quebró bajo el peso de las crecientes pruebas.

Agente detenido e interrogado
El comportamiento cambió drásticamente
Mientras seguían observando, empezaron a surgir más pruebas de la mala conducta del agente. “Mira esto”, su tono cambió de confiado a aprensivo mientras presentaban pruebas preliminares contra él. “Eso no es lo que parece”, dijo el agente, sudando bajo las deslumbrantes luces del interrogatorio. Se agitó y evitó el contacto visual mientras le exponían las pruebas. Su arrogancia anterior se evaporó, sustituida por un intento desesperado de salvar todo lo que pudiera de su deteriorada historia.

El comportamiento cambió drásticamente